En Zombilandia
no se piensa
solo se compra
En Zombilandia
se vigilan a si mismos
controlan
En Zombilandia
se alimentan
de cerebros
En Zombilandia
se tensan los cuerpos
hasta romperse
En Zombilandia
se sigue un codigo
pero no es genético
ni ético
En Zombilandia
tiene miedo al contagio
El miedo es su enfermedad.
viernes, 7 de febrero de 2014
HILOS DE TRANSICIÓN
Los tobillos pesados arrastran las cadenas
del dolor que no se quiso escuchar
marcadas tras un telón de lagrimas
derramadas en el olvido.
Las agujas de un tiempo en la esquina,
con hilo de autoridad impuesta,
cosió los labios al recuerdo
del atroz nudo que nos ató.
Cuando al tiempo el dolor corta los hilos
evocan que el momento cambio de calle.
La memoria flota en el consciente
y la verdad por las cunetas...
Pero la calle, aún, no ha cambiado de nombre.
del dolor que no se quiso escuchar
marcadas tras un telón de lagrimas
derramadas en el olvido.
Las agujas de un tiempo en la esquina,
con hilo de autoridad impuesta,
cosió los labios al recuerdo
del atroz nudo que nos ató.
Cuando al tiempo el dolor corta los hilos
evocan que el momento cambio de calle.
La memoria flota en el consciente
y la verdad por las cunetas...
Pero la calle, aún, no ha cambiado de nombre.
TIC-TAC
Las aguja del reloj segundan veloces,
el sol se acuesta con la luna,
el tiempo se fuga por el lavabo.
En el retrete pasan los mejores momentos.
La soledad se mete en la cama
y enseña al amor,
recoge abrazos, besos, escondidos de las mirillas.
El asfalto se convirtió en pradera.
Las hormigas asomaron por las terrazas.
Se cansaron de levantar
siete veces su peso
y se declararon en huelga.
el sol se acuesta con la luna,
el tiempo se fuga por el lavabo.
En el retrete pasan los mejores momentos.
La soledad se mete en la cama
y enseña al amor,
recoge abrazos, besos, escondidos de las mirillas.
El asfalto se convirtió en pradera.
Las hormigas asomaron por las terrazas.
Se cansaron de levantar
siete veces su peso
y se declararon en huelga.
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